miércoles, 18 de mayo de 2011

La mediatización de los Derechos Humanos no se tranza

El tema de los Derechos Humanos no vende. En Chile, la solidaridad y la ayuda social están enfrascadas en los mismos nombres de siempre, el Hogar de Cristo y Un Techo Para Chile son algunos de los estandartes más mediatizados de lo que el común de la gente conoce como “ayuda y justicia social”, sin embargo existen corporaciones e instituciones con una larga trayectoria que ayudan con mucha menos visibilidad y presupuesto. La Corporación Servicio Paz y Justicia, SERPAJ es uno de ellas.

Por Daniel Madrid.


El SERPAJ se constituyó en el año 1977, y trabaja a lo largo del país con 12 equipos regionales presentes de Arica a Coyhaique con proyectos de desarrollo social que tratan temas de infancia, juventud, prevención y tratamiento de consumo de drogas y educación. María Inés Salgado es la directora de proyectos en Santiago y afirma que la tarea ha sido ardua por los recursos y además relación con los medios de comunicación no ha sido fácil, ya que pueden desvirtuar el objetivo central en la ayuda debido a la victimización mediática, sobre todo si el eje de su labor es con niños.


¿Cómo se financian? ¿Reciben donaciones?
A ver, “repoco” porque el tema de los Derechos Humanos no es un tema de la sociedad empresarial, o sea el apoyo que ellos hacen es a instituciones que enfatizan el “asistencialismo”, por ejemplo y es duro decirlo,  el monopolio de la “mal entendida solidaridad” la tiene el Hogar de Cristo e instituciones que están bajo el alero de la iglesia católica, como por ejemplo Fundación Las Rosas y Regazo. El SENAME, nos financian en un 80% los proyectos del SERPAJ y el otro 20% es a través de la gestión de espacios, recursos humanos o algunas donaciones. Por ejemplo, hay colegios que hacen campañas y reúnen alimento y comida para los chiquillos, además de útiles escolares.

Su eje principal son los niños, ¿cuál es el trabajo específico que ustedes hacen?
El trabajo específico es acogerlos es este espacio. Previamente hacemos un trabajo de calle, de observación y contacto en calle, preferentemente a niños que están trabajando en la calle o tienen conductas o socialización callejera.

¿Trabajan con voluntarios?
No tuvimos experiencias muy buenas aunque se hicieron pequeñas capacitaciones… por ejemplo los extranjeros vinieron casi a pasear por tiempos de tres o cuatro meses.

¿Y voluntarios de Chile?
Los tiene el Hogar de Cristo, Regazo, Fundación Las Rosas, etc. Entonces es difícil tener voluntarios.

¿No cree que esto puede ser en parte en el cómo se ha difundido?
Es que no nos hemos dedicado precisamente por eso, porque sentimos que no hay una respuesta, puede ser que nosotros no queramos exponer a los chiquillos, por ejemplo no somos tampoco como la Teletón ponte tú.

¿Cuáles serían las formas correctas para no sensibilizar de una manera forzada e instalar los temas en los medios masivos?
Yo siento que si la gente conoce el proyecto o conoce a los niños, no es necesario victimizar ni dramatizar extremadamente la situación de ellos… se sabe que hay “dos países dentro del país”, hay dos extremos, los sectores muy vulnerables que tienen casi nada y los sectores muy pudientes que tienen en exceso.

Nos han hecho reportajes, nosotros accedemos a algunos, o sea nosotros ponemos las condiciones. Si ellos (los medios) no cumplen esas condiciones, decimos, no nomás. De repente nos llaman de un día para otro y dicen, “mira, sabes qué, tenemos que presentar en la edición de mañana tal tema y nos dijeron que podíamos hablar con ustedes y ojalá pudiéramos entrevistar a los niños”. Nosotros consideramos que los medios de comunicación son “súper” sin respeto, entonces decimos no, no podemos… porque para entrevistar a los niños se tiene que generar mínimo un vínculo, eso significa al menos un mes de estar en contacto con los chiquillos para que ellos digan exactamente lo que se quiere saber.



¿Qué piensan acerca de la difusión a través del periodismo ciudadano? ¿Han tenido algún acercamiento con este tipo de periodismo a través de estrategias?
A través de medios comunitarios. Nosotros sabemos que tienen “repoco” alcance pero son bien importantes, por ejemplo hay una radio que se llama Tierra, que siempre nos pide y da espacios para temáticas de nuestra institución.

Si bien es cierto que no somos tan visibles, somos bien respetados por cualquier gobierno de turno, o sea nosotros mantenemos nuestra independencia y nos paramos de igual a igual aunque ellos nos financien. Si ellos un día nos dicen “mira, no nos gusta la política que ustedes están implementando en los proyectos y por lo tanto no liciten”, nosotros diremos ok, y no licitamos.

¿No siente que el área de internet se ha descuidado un poco y que la podrían potenciar, por ejemplo abriendo canales para que la misma gente participe?
Puede ser, o sea puede ser también por una cuestión de recursos. Somos flojos, es verdad. Nosotros no somos tan independientes como funcionarios… la gente encargada de comunicación lo revisa (el material que se quiere publicar), para que vaya todo en una misma línea, etc. Nosotros siempre estamos mandando a SERPAJ Chile (la página web) nuestras acciones y como es tan grande, se publican unas dos líneas de cada proyecto… nos dedicamos a publicar pero no enfatizamos… quizás ése es un tema que tenemos que discutir.

¿Tienen alguna intención de asociarse con organizaciones externas que consideren hagan un buen trabajo comunicacionalmente hablando?
Es que se hacen trabajos, por ejemplo con el Hogar de Cristo. Si bien es cierto uno siente que ellos tienen la solidaridad” (mediáticamente), no los vemos como antagonistas ni como rivales sino que es una constatación. SERPAJ aborda el tema de los Derechos Humanos. La organización se creó para combatir a la dictadura con métodos no violentos, a través de la resolución no violenta de los conflictos, por lo tanto es distinto a como nació la Fundación Regazo, Fundación Las Rosas o el mismo Hogar de Cristo.

¿Juntos pero no revueltos?
Claro, es que no podemos. Sería absurdo que nosotros pretendiéramos captar a la población donante que tiene el Hogar de Cristo. Ellos jamás nos van a dar a nosotros recursos para hacer promoción a los Derechos Humanos, no es un tema que les interese. Por ejemplo al grupo Matte o al grupo Luksic, a ellos no creo que les interese el tema

¿Qué espera con respecto al aporte del periodismo, en especial el ciudadano con respecto al apoyo que puedan brindar a este tipo de labor?

Yo espero que todas las instituciones y organizaciones que trabajan en el ámbito de política de infancia, de jóvenes o de población vulnerada, generen incidencia política en conjunto con los medios, eso sería lo ideal. Nosotros no estamos solamente para recibir recursos, estamos dentro de las redes para generar incidencia política, yo creo que de alguna manera lo hemos hecho… porque hemos instalado tema. Por ejemplo hasta el año 1997 nadie hablaba sobre los niños en “situación de calle”. Esto se sensibilizó gracias al trabajo constante de todas las instituciones, no sólo del SERPAJ. Entonces eso esperamos, seguir manteniendo el espacio para generar incidencia política y la prensa puede ser un gran aliado.



No hay comentarios:

Publicar un comentario